Lo positivo y lo negativo de ver cine para adultos

Una experta recomienda usar la pornografía como un aprendizaje que permita enriquecer el placer.

Por:
Miguel Ángel
Valencia González
jueves, enero 9, 2020 4:56 PM
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Pornografía Daniel Mejía

Para algunas personas la pornografía se ha convertido en un estimulante o preámbulo para el sexo. Sin embargo, para otros es un vicio que resulta incontrolable.

Para Núria Jorba, sexóloga experta y terapeuta de parejas, las personas que consumen pornografía no pueden ser satanizadas pues esa conducta de la exploración corporal tiene sus ventajas y desventajas.

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La positivo

Desde el punto de vista positivo, ella resalta que el consumo de este tipo de contenidos sirve para expandir y diversificar la imaginación del amante, le brinda herramientas y visiones de los que podrían ser otras formas del placer corporal, según cita El Clarín, de Argentina.

Por otra parte, indica que la pornografía ha servido para liberar los prejuicios en torno a la sexualidad y les ha permitido a muchas más personas identificarse con el tema y hablar con naturalidad del mismo, permitiendo la exploración de nuevas realidades.

Desde otro punto de vista, indica que las parejas consumen pornografía pueden excitarse más fácilmente, pues es un contenido que en últimas busca generar deseo, y se convierte en un aliado cuando haga falta un poco de chispa al momento de consumar el acto sexual.

Lo negativo

Lo malo, según la sexóloga, es que las personas pueden pensar que la pornografía refleja el acto sexual de la vida real En este sentido, Jorba alerta que al practicar el sexo con una persona de tallas normales, se podría generar una desilusión frente a la idea que se había construido en la mente gracias al porno.

Además, la experta indica que otro problema es la adicción que genera, porque ese recurso se puede convertir en la única manera de excitarse y lograr un placer rápido y sin mayores compromisos. Eso puede llevar a a que en la situación real se pierda el deseo y se sustituya el acto sexual por la masturbación estimulada por la pornografía.

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Finalmente, la experta recomienda a las personas aprender a usar la pornografía como un acto de aprendizaje que no defina el acto sexual en sí mismo, ni que lo condicione, sino que lo enriquezca y lo llene de atributos para llegar a una zona de placer más amplia. 

Fuente: Sistema Integrado Digital