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La maldición de Engativá: historia de un sacerdote y una profecía
Un sacerdote conservador, una profecía y la eterna pobreza: el relato detrás de la maldición de Engativá.
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Según la leyenda, la maldición de Engativá fue lanzada por un sacerdote de apellido Chinchilla en el siglo XX. Este religioso, de inclinaciones conservadoras, estaba cansado de la conducta laxa de la gente en cuestiones de moralidad y religión. Tras un sermón que provocó la ira de los lugareños, Chinchilla maldijo a Engativá con la eterna pobreza.
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Sigue las noticias de La Mega en Whatsapp¿Cómo romper la maldición?
Sin embargo, el cura proporcionó una posible salida: la maldición podría romperse si un Papa visitaba Colombia y besaba el suelo engativeño. Increíblemente, esta profecía se cumplió cuando Pablo VI visitó el país y besó el suelo en el Aeropuerto Eldorado, cerca de Engativá, hace 40 años.
A pesar de la famosa maldición, Engativá es un lugar bendecido por la naturaleza y un rico patrimonio intangible. La zona es un recordatorio de la riqueza cultural y natural que perdura en medio de la adversidad.
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